Creo que una de las mejores ideas que tuve fue invertir en un viaje a
Puerto Vallarta, un destino simplemente extraordinario. Una localidad que no me dio lugar para el aburrimiento y en la que descubrí la existencia del paraíso. El ver todos los días el horizonte del mar turquesa, las eternas playas color dorado y el contraste que las montañas de la Sierra Madre aportan, lograron que cada uno de mis momentos allí, fueran inolvidables.
Pasear por islas, caminar entre acantilados y recorrer la caribeña ciudad te atrapa, te invita a conocer un mundo diferente, mundo en el que la tradición y la naturaleza hacen la pareja perfecta. El paisaje me fascinó y
el abanico de actividades entre las que pude elegir, lograron la perfección.
¿Quieres viajar a Puerto
Vallarta? ¡No lo dudes!
Reserva tu lugar entre alguno de los hoteles en Puerto Vallarta, las vacaciones de
Semana Santa, por ejemplo, son el momento perfecto para hacerlo. Por lo que escuché, es una fecha en la que el turismo se encuentra con expresiones culturales de características únicas.
Y si de actividades turísticas se trata, te recomiendo un recorrido de Semana Santa: Río Cuale & Las Caletas. Dos espacios naturales sin comparación. ¿Quieres saber más?
Río Cuale y su Isla
El Río Cuale es una de las principales fuentes de agua de Puerto Vallarta, cuando hice su trayecto, me encontré con un paisaje cambiante, pasé desde la sierra hasta un tupido bosque de coníferas y selvas, y llegué a su área principal: la Isla Río Cuale. Un pequeño patrimonio ideal para el que busca tranquilidad, romanticismo o incluso hacer ejercicio. Particularmente, como amante del arte que soy, al llegar busqué el museo y centro cultural del que tanto había escuchado. Este recinto se encarga del desarrollo y conservación de la cultura. Participé de un interesante taller de pintura y me dediqué a observar todo tipo de expresiones artísticas. La música, danza, teatro, el canto e incluso los juegos de ajedrez tienen su lugar en este espacio cultural.
Me escapé a esta isla en la que los callejones y las peatonales se conforman de una sencilla y admirable arquitectura, con detalles que le imprimieron una imagen única a mis fotos. No pude evitar realizar compras y adquirir recuerdos de Cuale que aún guardo y otros objetos perfectos para regalar.
Las Caletas
Mi próximo destino, para completar un día sin igual, fue tomar un catamarán hacia Las Caletas. Un paraje de Bahía Banderas que se conserva intacto y al que pude admirar recostada en una hamaca bajo las palmas, sintiendo la brisa del ambiente tropical. Aquí la selva encuentra su unión con la playa, y fue un ambiente en el que disfruté de varias aventuras. Primero, esnórquel; luego, kayak; y para finalizar, buceo. Siguiendo a mi guía de turismo, descubrí que el mar tiene aún más tesoros de los que uno puede imaginar, ¡esas aguas cristalinas sí que guardan secretos!
Cuando retorné a tierra firme y luego de haber emprendido mi caminata entre selva, jardines y el impresionante anfiteatro natural, seguido por la Pirámide Maya, aprendí a cocinar, y probé por primera vez la paella.
Así es, visita Puerto Vallarta en tu próximo viaje, aprovecha tu tiempo allí. En Semana Santa o cualquier otro feriado de tu año laboral, cualquier momento es perfecto si buscas al paraíso.
Fuente de Imagen: Flickr/ Autor: rbairdpccam
